Existen muchos métodos, algunos más completos y complejos que otros, y es bueno conocerlos todos en la medida que uno va creciendo más y más en la profundidad de la Biblia.

Sin embargo, he procurado investigar, pensar y preparar algo que sea apto y fácil para cualquier persona que desee empezar a estudiar a la Biblia, desde la anciana que no tuvo una educación formal universitaria (o escolar) hasta el joven recién convertido que lo único que sabe es que un día estaba ciego, pero que ahora ve (Juan 9: 25).

Hoy no deberíamos estar contentos solamente con saber que la Biblia es de fácil acceso para todos, deberíamos estar contentos cuando sepamos que para todos los que tienen acceso es fácil ahora leer y entender la Biblia.

El método, que creo que no es el más fácil, pero tampoco es el más complicado, es el siguiente: Estudio bíblico inductivo.^[1] Un nombre muy largo y complicado, también le podemos decir el método OIA, cuyas letras son las iniciales de los tres elementos que le componen:

• Observación = ¿Qué dice el texto?
• Interpretación = ¿Qué significa el texto?
• Aplicación = ¿Cómo se aplica para mí este texto?

Definamos mucho mejor a qué se refiere cada uno de estos elementos.

Observación

En esta primera etapa de observación, lo que vamos a hacer es interrogar el texto que estamos leyendo. Aquí buscamos responder las preguntas: ¿Quién? ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Por qué?, desde el mismo texto, es decir:

• ¿Quién está hablando a quién?
• ¿Qué están diciendo?
• ¿Cuándo lo están diciendo?
• ¿Por qué dicen lo que están diciendo?
• ¿Cuál es el contexto de este pasaje, etc.?

En observación es útil lo siguiente:

• Identificar personas claves.
• Identificar palabras o frases claves.
• Identificar los contrastes y comparaciones que hace el autor.
• Identificar el tiempo y las ubicaciones geográficas.
• Identifica cuál es la idea principal del texto.

Todo esto con el fin de que tengamos una rica comprensión de lo que el texto está diciendo para luego pasar a la interpretación. Algunas cosas que pueden ayudarte en esta primera etapa de observación es:

• Observa el texto con un lápiz (o un lapicero, un celular, computador, etc.) dónde escribas todo lo que ves mientras observa el texto.
• Marca cualquier conector que veas (palabras y frases como a propósito de, a fin de, por tanto, y, pero…) y observa para qué están allí. Por ejemplo, un «por tanto» debería guiarte a resumir lo que viene antes de esas palabras— y luego descifra la conexión entre tu texto y la sección anterior.
• Anota cualquier conexión que veas con otros pasajes de la Escritura.
• Anota las preguntas que puedas tener. Estas pueden ser preguntas de hecho. ¿Dónde estaba Susa? O pueden ser preguntas de especulación. Me pregunto ¿por qué Rut y su familia decidieron dejar Israel? Intenta obtener las mejores respuestas posibles a tus preguntas.

Por ejemplo, observemos el Salmo 23 (Haz una pausa, pon en práctica el observar y luego mira las siguientes observaciones que yo le hice al texto)

Estas son mis observaciones:

• David es el escritor, un rey que fue también un pastor y habla desde la experiencia.
• Esto es una poesía.
• El SEÑOR (YHVH) es un pastor que nos da descanso, renueva nuestras fuerzas, nos guía por sendas correctas, nos protege, nos conforta, nos lleva un gran banquete, nos honra delante de nuestros enemigos, nos bendice, y nos hace vivir en Su casa para siempre.
• Idea principal: El Señor es el pastor de Su pueblo.

Interpretación

Si la observación buscamos lo que el texto dice, en la interpretación buscamos lo que el texto significa, y, principalmente, lo que significó para su audiencia original (las personas que recibieron por primera vez este escrito) Para ello, hay algunos principios que nos guiarán para hacer una buena interpretación:

• Considera el contexto: Tu interpretación debería ser consistente con el tema o  propósito del libro en el que se encuentra. Si no lo es, has dado un giro equivocado en alguna parte ¿Estás considerando el contexto cultural e histórico para cuando el libro fue escrito y a quién fue dirigido?

• Deja que la Escritura interprete la Escritura. Siempre mira lo que enseña toda la Palabra de Dios respecto a lo que hayas encontrado en tu texto. Si tu interpretación va en contra de lo claramente establecido en las doctrinas de la fe, entonces necesitas reconsiderar tu interpretación. Jamás una parte de la Biblia va a contradecir a otra. Algunas veces esto va a requerir algo de trabajo, pero ese es el punto de estudiar la Biblia bien.

• No bases tu interpretación solamente en un pasaje oscuro de la Escritura: Un pasaje oscuro es aquel cuyo significado no está claro, aun cuando se utilizan los principios de interpretación apropiados. De nuevo, mira lo que enseña toda la Biblia al respecto de lo que hayas encontrado en tu texto.

• Interpreta la Escritura como el autor pretende que lo hagas: No le agregues un significado al texto que el autor no estaba considerando transmitir. Si dice, por ejemplo, que Dios creó los cielos y la tierra, eso significa exactamente eso. Pero, por supuesto, no toda la Biblia puede ser tomada literalmente. Hay poesía y metáforas que deben ser examinadas como lo que son, no literales, sino herramientas del lenguaje que usó el autor para transmitirnos algo.

• Estudia el Antiguo Testamento desde la revelación de Jesús y el Nuevo Testamento: Pregunta de qué manera un pasaje del Antiguo Testamento tiene conexión dentro de la enseñanza del Nuevo Testamento. Hazte preguntas como:

• ¿De qué manera este pasaje apunta a Jesús y su obra?
• ¿De qué manera esta verdad sobre Israel del Antiguo Testamento se relaciona con la iglesia del Nuevo Testamento?
• ¿Qué pasajes del Nuevo Testamento me ayudan a responder estas preguntas que encuentro en este texto del Antiguo Testamento?

• Adopta la actitud de ver como el Nuevo Testamento interpreta el Antiguo Testamento: Entrena tu cerebro para hacer conexiones entre pasajes del Nuevo Testamento y lo que ha sucedido antes en el Antiguo Testamento. Aquí es útil hacernos preguntas como:

• ¿De qué manera es este pasaje un cumplimiento de algo prometido en el Antiguo Testamento?
• ¿De qué manera es esta idea del Nuevo Testamento diferente o similar a una enseñanza del Antiguo Testamento?
• ¿De qué forma este pasaje del Nuevo Testamento aclara, revela o amplifica algo del Antiguo Testamento?

• Resume en una idea: Trata de resumir todo esto en una idea que contenga todo lo que puedes concluir a partir de la interpretación.

Estos principios son esenciales para la interpretación y es solo después de que interpretamos apropiadamente un pasaje que podemos avanzar a su aplicación.

Pon en práctica esto en el Salmo 23, y luego mira lo que encuentro útil en la interpretación de este pasaje al poner en práctica los principios anteriormente mencionados.

Esta son las ideas que encontré interpretando el pasaje:

• En el Nuevo Testamento encuentro que Cristo se llama a sí mismo el buen pastor (10: 11) y Él es y  hará cosas como la que dice el Salmo 23 por Su iglesia, por ejemplo:

• Él conoce a sus ovejas (10:14)
  • Él guía a sus ovejas (10:27)
  • Él da vida eterna a sus ovejas (28a)
  • Él protege a sus ovejas (10: 28b – 29)
  • Él nos llevará a morar en Su templo por largos días (Ap. 7: 15)
  • Él nos conducirá a manantiales de vida (Ap. 7: 17)
  • Él nos confortará (Ap. 7: 17b)
  • Él nos llevará a un gran banquete (Las bodas del Cordero) y veremos a nuestros enemigos avergonzados (Ap. 18 – 19)

• En resumen, El Señor Jesús es el buen pastor de Su Iglesia.

Aplicación

La aplicación es demasiado importante. Podemos pensar que si observamos e interpretamos bien hemos estudiado bien, pero Dios no quiere que solamente estudiemos Su Palabra, Él quiere que la vivamos. Santiago nos recuerda que debemos ser hacedores de la Palabra y no solo oidores (o lectores) de ella (Santiago 1: 22)

Algunas personas no aplican la Escritura porque no la entienden, pero para evitar que esto suceda, ya estudiamos la importancia de la observación e interpretación previo a esto. Otras personas no la aplican porque no ven como la Biblia se conecta con nuestras vidas en pleno siglo XXI y otras no lo hacen porque no quieren confrontar el pecado en sus vidas. Pero, ninguna de estas excusas son válidas, la Escritura se nos ha dado para que ella afecte cada área de nuestras vidas (2 Timoteo 3: 16 – 17), no basta con solo tener su información correctamente, sino obedecerla correctamente.

Algunas preguntas que puedes hacerte mientras estudias la Biblia para ayudarte a aplicarla en tu vida pueden ser:

• ¿Señala este pasaje algún pecado en mi vida por el cual yo necesite confesarme y arrepentirme?
• ¿Hay un mandamiento que debo obedecer en este pasaje? ¿Cuáles son las formas en las que no estoy obedeciendo? ¿Qué me está impidiendo obedecerlo completamente?
• ¿Hay una palabra de ánimo para mí en este pasaje?
• ¿Hay alguna promesa aquí en la que debo creer?
• ¿Qué voy a hacer diferente ahora que entendí este pasaje?
• ¿Hay en mí una actitud que debe cambiar?

Siguiendo con el ejemplo del Salmo 23, ¿Cómo aplicarías lo aprendido a este pasaje? Hazlo tú primero, y luego mira algunas formas en cómo encuentras que lo deberías aplicar respondiendo a algunas preguntas que veo útiles para aplicar:

• ¿Hay alguna promesa aquí en la que debo creer?

Definitivamente, todo lo que Cristo representa para mí como Pastor y creer en todo lo que hace y hará por Su pueblo.

• ¿Hay en mí una actitud que debe cambiar?

Debo cambiar mi actitud de ingratitud a una de gran devoción y alabanza a Dios, de la desconfianza a gran certeza de quién es Cristo y lo que Él ha prometido, de la falta de contentamiento, a la felicidad de que Jesús es mi Pastor y en Él tengo todo lo que necesito.

Para llegar a la aplicación, aquí hay algunos consejos:

• Ora primero: Necesitamos orar por visión espiritual para que veamos lo que Dios quiere decirnos a nosotros hoy en Su palabra.

• Medita: No hay un tiempo mínimo o máximo, pero saca el suficiente tiempo para pensar. No es bueno siempre estar de afán y corriendo cuando se trata de estudiar la Palabra, es bueno pasar el tiempo suficiente para que aquello que vemos en ella baje a nuestro corazón en realidad.

• Escribe las formas en cómo ese pasaje te está hablando mientras lo estudias: Muchos de nosotros, pensamos mejor cuando escribimos. Escribe lo que estás pensando mientras lo estás pensando.

• Compártelo con alguien más. Lleva lo que aprendiste a tus conversaciones con tu cónyuge, tus hijos, y tus amigos cristianos.

Ahorita parece abrumante tener todas estas cosas en cuenta al estudiar la Biblia, pero con práctica y el paso del tiempo puedes ver que se hace muchísimo más fácil y se convierte en un deleite en tu vida.

Recuerda que no basta con que veamos a personas con Biblias ¡Mi oración y deseo es que podamos ver a esas personas leyéndola, entendiéndola y viviéndola correctamente! Pues sus beneficios son gozo, paz, santidad, adoración y vida eterna.

“¡Cuán dulces son a mi paladar Tus palabras!,
Sí, más que la miel a mi boca.”  (Salmo 119:103, NBLA)

^[1] El método inductivo ha sido desarrollado y trabajado por muchas personas, sin embargo, lo que estoy a punto de resumir aquí es una adaptación del desarrollo que la iglesia Capitol Hill Baptist Church (CHBC) hizo y ha publicado en la página de 9 Marcas, junto con algunas ideas útiles que he aprendido con el tiempo, con la experiencia y de otros autores recomendados.